Pelope heredo toda la riqueza de su padre, pero fue expulsado de su tierra por el rey Ilos. Despues se fue con todas sus propiedades a Grecia y se establecioo en una peninsula que obtuvo su nombre: el Peloponeso. 

Un dia se enamoro de Hipodamia, hija del rey Enoamo de Pisa. Pero el rey no queria que se casaran. Una vez mas hay distintas versiones por las razones: unas versiones dicen que le habian advertido de que quien se casasa con su hija lo mataria, otros que estaba enamorado de su propia hija. Sea lo que sea, empezo a planear la manera en la que seria imposible que ambos se casaran. Finalmente organizo una carrera de caballos para dar una oportunidad a todos los admiradores de la princesa para que pudiesen competir contra el. Quien consiguiera ganarle, conseguiria a su hija y el reino de Pisa. Pero quienes perdieran, se les cortaria la cabeza y les colgarian de las paredes de la ciudad. Lo que nadie sabia era que eran los caballos de Ares, el rey de la guerra, asi que eran imposibles de cabalgar.   

Asi que Pelope empezo a disenar un plan. Al final, despues de prometerle la mitad del imperio, convencio a Mirtilo, el cabalgante del rey, para que se cambiasen los ejes del carro del rey por otro hecho de cera. Asi que Pelope no tenia que darse tanta prisa. Conducio a la siguiente esquina y dejo que el destino hiciese el resto. 

Cuando los caballos de Ares empezaron a correr, los ejes empezaron a torcerse en las curvas, hasta que se rompieron y el rey se cayo del carro y murio. Asi, Pelope gano la carrera y con ella a Hipodamia y todo el imperio de Pisa.   

Por su puesto Mirtilo queria parte del premio, pero Pelope lo encarcelo y lo abandono en la costa. Desde entonces, el mar que bana la costa se llama con su nombre. Pero durante su cautiverio Mirtilos lanzo una maldicion a Pelope y a toda su generacion. Despues de eso, ninguna de las maneras en las que Pelope intento reconciliarse con los espirituos y los dioses funciono, asi que todas sus generaciones venideras sufrieron muchas desfortunas. 

Pelope tuvo muchos hijos, entre ellos Crisipos, el amante de Layo, el padre de Edipo. El cabalgante Mirtilo se convirtio mas adelante en una constelacion. Hipodemia dio a luz a Atreo, Tiestes, Peistenes, Piteo (el abuelo de Teseo) y Nikepte.