Crono, el padre de Zeus, supo desde joven que uno de sus hijos se convertiría en un dios más poderoso y fuerte que él. Así que rápidamente después de su nacimiento, este se comió a todos sus hijos. Zeus fue el último hijo y Rea se lo llevo con ella a Creta donde lo escondió en una cueva. Zeus fue criado por la cabra Amaltea y algunas ninfas. Una vez se hizo mayor, acabo con su padre y libero a sus hermanos.  

Juntos, lucharon contra los titanes y los gigantes. Después de su victoria, Zeus era el legítimo gobernador del cielo y de la tierra. Su hogar era el monte Olimpo, donde vivía junto con los otros 11 dioses y diosas. Su arma era el rayo y, al contrario que otros dioses, su poder era ilimitado, era el dios más poderoso de todos. Su mujer era su hermana, Hera. Juntos tuvieron a Ares, Hefesto y Hebe. Zeus engaño a su mujer en numerosas ocasiones, lo que era el comienzo y la razón de todas sus peleas.  

De las tantas aventuras que Zeus tuvo, nacieron muchos dioses, semidioses y héroes. Con Maya tuvo a Hermes, con Sémele a Dionisio y con Leto a Apolo y Artemisa.   

Si dejas de lado sus aventuras, era un dios justo. Castigaba a los malos, pero también aliviaba el dolor y dar justicia a quienes lo necesitaban.